El Gobierno evalúa deportar a 133 extranjeros por fraude en el examen de residencias
Tras realizar el nuevo examen, ninguno de los participantes logró igualar ni superar la nota obtenida en el primero.
El Gobierno de Javier Milei analiza la deportación de 133 extranjeros que ingresaron al país como turistas para rendir el Examen Único de Residencias Médicas, pero que no declararon el verdadero motivo de su visita. Según reveló A24, la decisión surge tras detectarse un fraude masivo durante la prueba, con maniobras que incluyeron la filmación y transmisión ilegal del examen.
La investigación apunta especialmente a Adrián Alejandro David Castillo, ciudadano ecuatoriano acusado de registrar la evaluación, recibir las respuestas y distribuirlas entre otros postulantes. El caso quedó en manos del juez federal Juan Ercolini, quien indaga una presunta defraudación al Estado.
Los 117 aspirantes bajo sospecha debieron rendir nuevamente el examen el 7 de agosto, bajo estrictos controles. El resultado fue contundente: ninguno igualó ni superó la nota original, y la mayoría sufrió bajas significativas. De ellos, 109 quedaron reprobados.
El Ministerio de Salud, encabezado por Mario Lugones, publicó en su web oficial los listados comparativos de ambas instancias, confirmando las irregularidades. "En medicina, el ingreso se gana con conocimiento y esfuerzo", advirtió Lugones, defendiendo la transparencia del sistema.
Si prospera la medida, los implicados no solo quedarán fuera de las residencias médicas, sino que además podrían ser inhabilitados para ingresar nuevamente al país bajo cualquier régimen migratorio. Paralelamente, el Ejecutivo presentó una denuncia penal contra los responsables del fraude y sus cómplices.
La causa sigue abierta y se investiga la posible existencia de una red organizada para burlar el examen, un hecho que el propio ministro calificó como "grave y peligroso" para la salud pública argentina.