Las empresas de micros de larga distancia suspenderían la entrega de pasajes gratis por discapacidad
Es una medida de fuerza que la Celadi (Cámara Empresaria de Larga Distancia) tomaría si el Gobierno no paga lo que reclama el sector. De concretarse esta medida empresarial, miles de personas se quedarían sin la posibilidad de acceder a los pasajes sin cargo.
Las empresas de larga distancia advierten que dejarán de entregar este tipo de beneficio por la deuda que el Gobierno mantiene sin cancelar con el sector.
Mes tras mes, los ómnibus de larga distancia entregan más de 95.000 pasajes gratuitos a personas con certificado de discapacidad que así lo requieren para viajar por Argentina.
Es una medida de fuerza que la Celadi (Cámara Empresaria de Larga Distancia) tomaría si el Gobierno no paga lo que reclama el sector. De concretarse esta medida empresarial, miles de personas se quedarían sin la posibilidad de acceder a los pasajes sin cargo.
Sin embargo, este mecanismo está a punto de dejar de funcionar debido a que, según advierten las empresas, el Ministerio de Transporte de la Nación apenas compensa una cifra menor al 10% del valor real de estos boletos y les adeuda los pagos desde junio de 2022.
La deuda que reclaman a Transporte es de 10 meses de pagos por los más de 1 millón de boletos que entregaron sin cargo a discapacitados para viajar a todo el país.
Cada año, cerca de 1,5 millones de pasajes gratuitos son aportados por las empresas de buses de larga distancia a personas con alguna condición de discapacidad. Además sus acompañantes y personas trasplantadas, permitiéndoles viajar sin costo. Todas las veces que lo deseen y a cualquiera de los más de 1.600 destinos que vincula el transporte por carretera en la Argentina.
Según un informe de la Cámara de Empresas de Larga Distancia (Celadi), «este esfuerzo asumido únicamente por el transporte terrestre genera un impacto a las empresas de buses por ingresos no percibidos superior a los $10.000 millones al año».
En el documento, las compañías aseguran que en promedio, entregan más de 95.000 pasajes sin cargo cada mes por un valor real de mercado del orden de los $1.000 millones.
Cómo funciona el sistema de boletos para discapacitados
Las personas con certificado CUD o INCUCAI ingresan al sitio de reservas de la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) y solicitan el boleto con la fecha y el destino que precisan.
Confirmada la reserva, reciben el ticket de manera online.
Esa compensación, sin embargo, tiene un máximo de pesos asignados más allá de que la cantidad de boletos solicitada sea mayor al fondo de compensación. En ese caso, las empresas no reciben ningún monto a cambio de la diferencia.
Asimismo, las empresas vienen sumando nuevas unidades del servicio regular de micros de larga distancia. Que incorporan una butaca especial destinada a personas con discapacidad motriz.
Se trata de un asiento que sale de forma automatizada fuera del bus permitiendo un ascenso y descenso mucho más sencillo a personas con movilidad reducida.
«Queda en evidencia que, aún habiendo mejorado el monto máximo de compensación en agosto de 2022 (subió a $80 millones) lo aportado por el Estado resulta insuficiente frente al valor real de esos pasajes y a la demanda creciente de los mismos», asegura el documento de la Celadi.
Basta observar, por ejemplo, que desde enero a febrero, las empresas entregaron boletos por $1.000 millones mensuales y sin embargo se le reconoce un 8% de ese aporte.
«Aún así, insistimos, ni siquiera eso se les está abonando a las compañías de larga distancia. Lamentablemente, todas las gestiones realizadas durante meses ante el Ministerio de Transporte de la Nación, como así también las notas presentadas ante la Dirección Ejecutiva de la Agencia Nacional de Discapacidad resultaron en vano», destaca el informe de la empresa.
«Nos están empujando a tomar una decisión»
Al respecto, Gustavo Gaona, vocero de la Celadi, advierte que se está empujando al sector «a tomar una decisión que intentamos de todas las formas evitar. La ciudadanía debe comprender que no solo asumimos este esfuerzo en soledad, sino que, además, ni siquiera logramos cobrar lo comprometido».
El empresario hace una comparación con lo que ocurre con las empresas a las que representa con lo que recibe Aerolíneas Argentinas en subsidios a pesar de que no aporta asientos para discapacitados.
«En consecuencia, en un transporte con subsidio cero como es el nuestro, estos costos terminan encareciendo el precio final del boleto y perjudicando a nuestros pasajeros.» agrega Gustavo.
Por lo tanto, reclama a Transporte que regularice y abone a las compañías de buses los últimos 10 meses adeudados, establezca algún mecanismo de actualización de los valores de compensación eliminando los topes máximos mensuales, que se comprometa a reconocer y compensar un porcentaje de cada boleto entregado y que analice la viabilidad de sumar a las otras modalidades del transporte, como el aéreo, «para compartir junto a los buses el enorme esfuerzo que significa aportar cientos de miles de boletos sin costo para viajar a lo largo y ancho del país».
De lo contrario, Gaona señala que como resultado del evidente incumplimiento del Estado, las empresas de transporte se verán obligadas a discontinuar inmediatamente la entrega de gratuidades.
Fuente: NDI