Massa consiguió un nuevo préstamo por US$ 1.100 millones del BID y de Arabia Saudita
El Gobierno apuesta por el endeudamiento externo como una herramienta desesperada para calmar las paridades alternativas del dólar. La divisa cotiza por encima de los $400 y el Riesgo País supera los 2.300 puntos básicos desde hace dos semanas.
El ministro de Economía Sergio Massa anunció un nuevo paquete de préstamos externos que serán destinados a engrosar las reservas del Banco Central, en medio de la dramática crisis de divisas que atraviesa el país por el agotamiento del cepo cambiario.
Se aprobó un nuevo crédito por US$ 600 millones proveniente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), formalmente una "Línea de Crédito para Proyectos de Inversión" y un primer desembolso adicional de hasta US$ 200 millones para atender el sistema de salud. Pero informalmente el objetivo principal del préstamo no es otro sino acercar un poco más la meta de reservas internacionales con el FMI.
Por otra parte, el ministro de Economía confirmó la conformación de otro nuevo préstamo esta vez por US$ 500 millones proveniente del Fondo Saudita para el Desarrollo. La línea de crédito buscará aceitar inversiones en "salud alimentaria y energía", incluyendo la construcción del gasoducto Néstor Kirchner.
El Directorio de @el_BID aprobó un Crédito para Proyectos de Inversión por 600 millones de dólares, con una primera operación de 200 millones dedicados a reducir la mortalidad prematura y fortalecer los sistemas de salud de todas las provincias de la Argentina.
— Sergio Massa (@SergioMassa) April 13, 2023
Con los nuevos créditos destrabados, el equipo económico consiguió fondos frescos por US$ 1.100 millones a devolver a largo plazo. El impacto en materia de reservas internacionales mejora las perspectivas para evitar un incumplimiento mayor con el FMI, pero condiciona al próximo Gobierno.
Sin embargo, la meta de la comitiva de Massa es reunir al menos US$ 3.000 millones en nuevo endeudamiento externo. A estos efectos, el Gobierno pretende más financiamiento del Banco Mundial y la Corporación Andina de Fomento (CAF), así como acelerar los desembolsos por los préstamos ya cerrados.
Tras el impacto de la sequía sobre el ya muy desbaratado sistema cambiario que rige el cepo, el oficialismo apuesta por el endeudamiento para aminorar el salto del dólar en las paridades alternativas legales y contener las expectativas para la suba del dólar informal.
La paridad cambiaria informal finalmente alcanzó los $400 en la jornada del día jueves, lo cual significó una brecha cambiaria superior al 80%. La cotización del dólar oficial cerró el día en los $221 para la venta, el dólar Contado con Liquidación (CCL) llegó a los $402 y el MEP (el dólar bursátil) superó los $388.
Asimismo, el índice de Riesgo País continúa apostado por encima de los 2.300 puntos básicos por segunda semana consecutiva, alcanzando un pico de hasta 2.472 puntos entre el 6 y el 7 de abril.
Pero pese a las turbulencias, el Banco Central decidió no alterar la tasa de política monetaria (la tasa aplicada a las Leliq), que seguirá apostada en el 78% nominal anual. Al contrario de lo que se suele sugerir, la tasa de las Leliq no pretende realmente compensar la dinámica inflacionaria sino más bien contener la brecha cambiaria.
Fuente: La Derecha Diario
