Triple crimen en Varela: aseguran que buscaban recuperar un cargamento de droga robada

El fiscal Adrián Arribas, que investiga el triple femicidio de Florencio Varela, pidió la prisión preventiva para los ocho detenidos y solicitó que la causa pase a la Justicia Federal. Considera que se trata de una organización narcocriminal estructurada, que actuó con violencia extrema para recuperar varios kilos de droga robada.

"El caso no se agota en un hecho de violencia urbana. Expone un entramado criminal donde confluyen narcotráfico, trata y homicidios organizados", sostuvieron los fiscales en el escrito, firmado también por Diego Rulli y Claudio Fornaro.

Las víctimas, Brenda del Castillo, Morena Verdi y Lara Gutiérrez, fueron secuestradas, torturadas y asesinadas. Sus cuerpos estaban enterrados en una casa que, según la investigación, funcionaba como base operativa de la banda.

Quiénes son los imputados

Los fiscales pidieron la preventiva para:

• Lázaro Víctor Sotacuro, señalado como cabecilla de la organización

• Celeste Magalí Guerrero, dueña de la casa donde hallaron los cuerpos

• Miguel Silva, pareja de Guerrero

• Daniela Ibarra y Maximiliano Parra, vistos limpiando manchas de sangre tras el crimen

• Florencia Ibáñez, sobrina de Sotacuro

• Matías Agustín Ozorio, capturado en Perú y acusado como autor material

• Ariel Jeremías Giménez, acusado de haber tapado el pozo donde enterraron a las víctimas

A varios de ellos se los acusa de privación ilegítima de la libertad agravada, homicidio agravado por ensañamiento, alevosía y violencia de género, y criminis causa, es decir, matar para encubrir otro delito. A las mujeres imputadas se les retiró el agravante de género, pero se mantuvieron los otros cargos.

Un crimen narco

El fiscal Arribas explicó que las jóvenes fueron engañadas con la promesa de una fiesta o trabajo pago, y una vez dentro de la casa en Villa Vatteone fueron atacadas con "extrema violencia y saña". Las autopsias confirmaron múltiples fracturas, lesiones y mutilaciones.

Además, el documento judicial detalla que uno de los líderes narcos, "Pequeño J" (Tony Jansen Valverde Victoriano), operaba desde Perú junto a David Gustavo Morales Huamaní ("el Loco David"). Guerrero, una de las imputadas, habría recibido mil dólares por el traslado de las chicas. "Las mataron por una deuda o venganza ligada al robo de droga", escribió el fiscal.

Pruebas y encubrimiento

Las cámaras de seguridad captaron a Ibarra y Parra lavando las paredes y suelos con sangre. Esa conducta fue calificada como encubrimiento agravado por parte de los fiscales, quienes remarcaron que todo fue parte de un operativo consciente para obstaculizar la investigación.

"Las víctimas eran mujeres jóvenes en situación de vulnerabilidad. Esa condición fue aprovechada para someterlas y eliminarlas", sostuvieron.

La jueza de Garantías deberá resolver en los próximos días si acepta la prisión preventiva y si eleva el expediente al fuero federal, como ya solicitó el Ministerio Público de La Matanza, ante los vínculos directos con el narcotráfico internacional.